Estamos acostumbrados a ver videos impuros de orientales con el pubis poblado de pelos, y en algunas ocasiones, más o menos retocado, aunque la moda de los felpudos se remonte más a los años 70.
Hoy tenemos la excepción que confirma la regla con esta asiática que luce el pubis totalmente rasurado, y para rematar y romper otro topicazo, el compañero de cama de la chica tiene un miembro viril que supera por tres el tamaño de un pulgar, escasa dimensión a la que nos tienen acostumbrados los autóctonos de esas tierras.
El modus operandis de la relación sexual en el video es muy europeo: mamada inicial, masturbación a la Minamoto y penetración vaginal aprovechando que el rabo de Oriente es mínimamente aceptable para mantener un coito, y todo ello con el morbo añadido de estar haciéndolo ante un espejo, lo que es como visualizar una película porno propia en directo.
¿Qué detalle destacáis del polvo asiático?